Más
preocupados por la denuncia en FIFA que complica a varios dirigentes que por la
Copa América del Centenario, las tres organizaciones continentales se reunieron
en México y anunciaron que la sede de Estados Unidos sigue en pie. Igual, no
todo está dicho.
Hubo reuniones y versiones encontradas. El Distrito Federal de México cobijó a representantes de la Conmebol, la Concacaf y la USSoccer (Federación de Estados Unidos) para comenzar a darle forma a la Copa América del Centenario que tiene como sede estipulada de ante mano a Estados Unidos, pero que se puso en duda en los últimos meses ante la denuncia que ese mismo país realizó sobre la FIFA y que arrastró a buena parte de la cúpula dirigencial de esta parte del mundo.
Hubo reuniones y versiones encontradas. El Distrito Federal de México cobijó a representantes de la Conmebol, la Concacaf y la USSoccer (Federación de Estados Unidos) para comenzar a darle forma a la Copa América del Centenario que tiene como sede estipulada de ante mano a Estados Unidos, pero que se puso en duda en los últimos meses ante la denuncia que ese mismo país realizó sobre la FIFA y que arrastró a buena parte de la cúpula dirigencial de esta parte del mundo.
Si bien se
rumoreó una posible ausencia de los portavoces del país organizador, éstos se
hicieron presentes y debieron dar el brazo a torcer, al menos en el análisis
inicial. Según las versiones de mayor peso que se filtraron de las
negociaciones, la intención de Estados Unidos es correrse a un costado. Ante
esto, Conmebol y Concacaf comenzaron a debatir quién se haría cargo de la 45ª
edición, que servirá para celebrar los 100 años de un certamen que siempre se
realizó en diferentes países de América del Sur.
Aunque, a
decir verdad, la principal preocupación que se palpaba en el ambiente
dirigencial estaba centrada en el avance de la denuncia contra la FIFA que hoy
tuvo la palabra del argentino Alejandro Burzaco ante la jueza.
La postura
era firme de uno y otro lado. Los brazos fuertes de Estados Unidos sentenciaban
que la Copa América no se iba a hacer bajo el ala de la Concacaf, teniendo en
cuenta que uno de los principales focos de corrupción hallada en la denuncia
fue este mismo certamen.
Mientras
tanto, la Conmebol esperaba por una determinación final para comenzar a buscar
soluciones (se rumoreó un posible traslado de la sede a Ecuador o Colombia) y
así evitar cargar con los coletazos económicos y políticos de quitar a EE.UU.,
aún sin su declinación oficializada.
Finalmente,
el peso del resto de los integrantes de la Concacaf primó por encima del
interés de Estados Unidos, al menos en el principio. Jurgen Mainka, Director de
Comunicación de la Concacaf, salió a dar la palabra autorizada:
"Entendimos que tenemos que estar totalmente alineados de la meta común de
llevar la Copa América Centenario a su realización en Estados Unidos. Debemos
seguir dando pasos para que esto se lleve a cabo". Igualmente, todavía no
está dicha la última palabra.
Fuente: Playfutbol.
Fuente: Playfutbol.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario